
A nivel energético la palabra “interdimensional” ha tomado en estos tiempos un protagonismo casi imposible de ignorar.
Parece extraño pensar que hace algunos años atrás ésta palabra no tenía demasiada relevancia; también suena extraño pensar que ni siquiera hoy figure en los diccionarios…
En el plano cuantico se habla ahora de la expresión: interdimensional o multidimensionalidad. ¿Cuál es la diferencia entre ambas palabras? Personalmente siento que la expresión “multidimensional” hace mención a las múltiples dimensiones que existen más allá de la materia, e interdimensional hace referencia a “las múltiples dimensiones que vibran al unísono”. ¿Qué quiere decir esto?…
Quiere decir que en otros planos existe otra forma de vida diferente a la materia en la cual estamos ahora. Existen otras capas de conciencia donde existe la vida, y ese plano es la “interdimensionalidad”… un espacio donde hay energía, información, y donde “el tiempo” no es como el que nosotros conocemos desde ésta realidad humana. En ese plano la vida es eterna: “siempre es lo que es”.
La materia es una condensación de la energía que habita en ese plano, es decir, que la materia es energía condensada y contiene un campo interdimensional.
“La verdadera vida transcurre en ese espacio interdimensional”; nosotros los humanos somos vida por un período de tiempo determinado aquí en la tierra, pero ésta experiencia física un día se termina y nuestra esencia regresa hacia ese espacio interdimensional que siempre existió, es y será por toda la eternidad. Allí, en ese lugar constante, estamos nosotros, todos los seres que nos revestimos temporalmente de humanos, pero que en esencia primitiva somos esencia. Seres Divinos.
¿Qué sucede mientras habitamos la materia?, ¿Dónde está ese espacio interdimensional eterno que no lo vemos con nuestros ojos?…
Mientras habitamos la materia, el canal conductor hacia lo interdimensional eterno es nuestro ADN, quien contiene en sus múltiples dimensiones todo el campo cuántico. En ese campo está toda la información de lo que somos, nuestras memorias karmicas, nuestro cuerpo de luz, nuestra alma, nuestra esencia divina; está contenido nuestro yo, los seres existentes, toda la información de lo que vivimos en esta vida, en las vidas pasadas… En ese plano y campo interdimensional esta “todo”: allí transcurre la verdadera vida y nosotros los humanos somos los ejecutantes de esa sinfonía sonora en la realidad y linealidad humana.
Brindaré a continuación un ejemplo de información de un ser humano, y veremos, cómo éste guarda y registra cada experiencia vivida, generando así un banco de recuerdos interdimensionales que quedarán sellados en ese campo.

Tomemos imaginariamente el linaje de Amelia. Ella, en una vida pasada fue abandonada por su padre… Creció y vivió una vida muy triste y amargada por ese acontecimiento de abandono, por lo tanto terminó por frustrarse y jamás pudo sanar ese hecho. Luego ella siguió atrayendo para su vida hombres que la abandonan.
El campo interdimensional archiva cada momento vivido, sería como decir metafóricamente que nuestros ojos y nuestros sentidos de percepción, fueran como una máquina de filmar. Esa máquina de filmar va archivando cada cosa que acontece alrededor suyo: todas las escenas o situaciones que ésta máquina registra van quedando guardadas en su memoria. Si revisamos el contenido de dicha memoria veremos una película completa, la cual tendrá pasajes con diferentes matices: algunos felices y otros tristes.
Veamos ahora la película que vivió Amelia…, hagamos de cuenta que en todas sus vidas de encarnaciones sobre el planeta tierra conforman una sola película. La película completa de Amelia puede tener diferentes capítulos… lo cierto es que cada uno estará teñido de un matiz o impronta diferente.
En uno de los capítulos que Amelia tiene guardado en su película: el registro de abandono de la parte masculina que ella lleva en su campo interdimensional. La película que fue filmando a lo largo de su vida hace que ella atraiga para su experiencia la esencia de ese mismo acontecimiento que vivió, repitiendo los escenarios, patrones o circunstancias vida tras vida.
La película que Amelia tiene dentro, grabada en su interior interdimensional, representa “lo conocido” para ella inconscientemente, por lo tanto solo puede atraer para su vida las mismas realidades que son de conocimiento para su conciencia, impidiéndole ver otros escenarios, realidades y guiones en su vida. Le es difícil poder experimentar algo diferente a lo que experimentó anteriormente, ya que aquello que vivió quedó girando en su campo de realidades, tomando esa situación como la “única realidad” que ella conoce.
Hagamos de cuenta que Amelia en su vida actual, sigue repitiendo el patrón y aún no pudo resolver ese Karma, no puede salir de la película que vivió; la película que tiene filmada y sellada en su interior volverá a repetirse indefinidamente.
Supongamos ahora que Amelia vuelve a encarnar en otra vida, independiente del genero que encarne ella en su campo interdimensional (en el registro de sus vivencias anteriores) contiene la información de abandono de la parte masculina. El guion de su película sigue siendo el mismo, y ella, la actriz del guion, continúa repitiendo los mismos escenarios… recordemos que es la película que fue filmando a lo largo de sus experiencias en el planeta tierra. Bella tiene en ésta nueva encarnación una oportunidad de cambiar el esquema, el guion de su película, y comenzar a interpretar un nuevo libreto. Puede resolver y limpiar las viejas escenas de su campo interdimensional y de esa manera reescribir una nueva película. Tomar consciencia.
Amelia nace y vuelve a sufrir cualquier tipo de abandono. a lo largo de su vida el mismo escenario de que la abandonen se manifestara hasta que tome consciencia.
¿Qué está manifestando Amelia en su encarnación? La información que lleva grabada en su interior interdimensional, en ese campo eterno… ¿Tiene la posibilidad de cambiar y transmutar? Sí, puede modificar la película interior y de esa manera tener un nuevo registro de información.
Si Amelia vivió en el pasado el sufrimiento del abandono, ¿por qué sigue repitiendo el mismo escenario?, ¿Dónde está el sentido del tiempo en este acontecimiento?. El tiempo solo existe en este marco lineal y tridimensional, aquí en esta realidad, pero en el otro plano interdimensional el tiempo en realidad no existe, todos los potenciales pasados, presentes y futuros acontecen en el “ahora”. Por ello digo que la verdadera vida transcurre en el campo interdimensional, y luego nosotros, los humanos, somos los actores o protagonistas de ese registro y guion que tenemos archivado.
Es como si el guión de nuestra vida se encontrara ahí, hubiera un registro escrito y nosotros, los actores, nos expresáramos de acuerdo a ese libreto. El día que el guión cambia, cambia la actuación, los actores de reparto, etc, por lo tanto, cambia el escenario de nuestra vida.
Todas las raíces de los problemas se encuentran guardados en ese campo eterno; ¿y por que digo eterno?… Porque en realidad ese campo no tiene pasado o futuro, siempre es “ahora”. El campo interdimensional de Amelia tiene guardado la Amelia de 2 años, de 3, de 4, de 5 años… y así sucesivamente; tiene archivado él o la que fue en el 1500, en el 1200, y así continuamente en todas las encarnaciones que su alma encarnó; de esta manera se han creado registros interdimensionales de todas sus vivencias, los cuales, condicionan su vida actual, ya que como os cuento Amelia es la actriz de esa película que fue filmando y grabando en sus registros. Si el guion de la película de Amelia se desenvuelve en mayor medida en el drama, ésta creará escenarios que contengan tintes dramáticos; en cambio si ese guion dice que hay felicidad (la actriz de la película: Bella) recreará escenarios de felicidad.
Con este artículo solo deseo expresar que la verdadera vida transcurre en ese campo y que nosotros los humanos somos una manifestación de algo que acontece primero allí, en ese espacio eterno, el hogar primitivo de donde provenimos todos, el lugar de donde venimos y el lugar hacia donde vamos cuando la energía condensada en la materia se unifica nuevamente con la esencia, ser amoroso e interdimensional que somos…